11-E
Limpio y brillante, presenta un atractivo color amarillo pálido con reflejos dorados. Intenso, franco y complejo. La variedad y el terruño se reflejan fielmente en las notas de fruta blanca madura y los matices balsámicos. La crianza aporta elegantes toques de cítricos dulces y frutas confitadas, que confieren complejidad y elegancia al vino. En boca resulta fresco, equilibrado, glicérico y sabroso, apareciendo de nuevo elegantes aromas varietales y de crianza, con un postgusto agradable, largo y persistente.
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